EL CIELO DE LAS TRUCHAS.
He vuelto al cielo de las truchas. La primera vez que estuve, ya al dia sienguiente en casa llegue a pensar que todo habia sido un sueño, un bonito sueño. Pero no es un sueño, es cierto que estan ahi, más desconfiadas, mas asustadizas, pendientes de cualquier ruido que pueda romper el silencio de la tabla, de cualquier sombra que consigue cambiar de golpe la fisonomia del fondo.
Se me fue de las manos justo cuando le tiraba la foto. 38 cm. |
He vuelto al cielo de las truchas, no me han dado muchas opciones, solo se dejaban ver cuando ellas sabian que no las podia molestar con mi mosca, me provocaban con sus subidas para que me acercara a ellas, para que me posicionara lo mejor posible para lanzarles y de pronto.... desaparecian. Estatuta de sal en el centro del rio, cinco, diez incluso quince minutos sin mover un solo musculo, siguen sin aparecer.
Al final de la tarde solo han sido dos las capturas, 38 y 64 cm.
Imposible fotografiar uno solo a las truchas grandes y mas si uno no lleva sacadera.
Esta es la imitacion con la que logre engañar a las truchas, con la diferencia que el saco alar se rompio en un enganche que tuve en una zarza y la pluma quedo echada hacia atras mas o menos como un tejadillo de tricoptero.
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